2008 - NY - Dia7

Domingo 10 de Febrero:

Finalmente amanecio con un poco de sol. No se si fue la suerte o si fue un acto divino en recompensa a estos dos infieles que decidimos acercarnos a la iglesia, pero lo cierto es que tuvimos al menos un par de horas de cielo azul.

Llegamos a Harlem en ómnibus, aprovechando el recorrido para conocer un poco mas del Upper Manhattan. Pero lo cierto es que no venimos bien con los horarios porque otra vez nos encontramos con todo cerrado… Aprovechamos para caminar un poco por el barrio visitando las distintas igleasias para ver en cual quedarnos. Finalmente a las 10:30 comenzaba el servicio en la “Antioch Baptist Church” en el 515 de la calle 125 (la 5ta avenida de Harlem).

Realmente fue increíble! Nos sentamos en la ultima fila que esta preparada para los turistas, eramos nosotros dos y 8 o 9 españoles que llegaron sobre la hora, el resto feligreses de la iglesia en sus trajes de domingo. Señoras gordas con sombrero de capelinas cumpliendo con todos los estereotipos conocidos.

Lamentablemente (aunque es muy logico) no estaba permitido tomar fotos ni filmar asi que nos quedaremos solo con los recuerdos de lo vivido.

Desde que comenzo el servicio vimos que la musica cumple un papel importantisimo… La banda sonaba como la Ostia (amen!) y cualquiera de las decenas de personas que se acomodaban detrás del atrio agarraba el micrófono y cantaba como si fuera lo mas natural del mundo. Unas voces que lograron ponernos la piel de gallina.

Durante largo rato parecio que estuvimos dentro de una película. El coro cantaba, los asistentes bailaban, gritaban y rezaban… casi que lograron convertirme en creyente.

Pasado el mediodia salimos de la iglesia y paseamos otro poco por Harlem, donde hicimos algunas compras no previstas… pero los precios que encontramos eran inevitables. Grandes Ofertas de domingo.

Esto hizo que demoremos mas de lo pensado, y cuando decidimos tomar el metro hasta el Chinatown (cruzar toda la ciudad hasta el sur de la isla) para ver el desfile del año nuevo, vimos que era demasiado tarde para llegar y nos fuimos a almorzar por nuestro barrio.

En dos minutos vimos como cambio el clima, se levanto el viento, bajo la temperatura y comenzo a nevar…. Mucho!


Asi que nos compramos algunas delicatesen (lease barras de chocolate y brownie) y decidimos guardarnos en el depto a descansar y a protegernos del intenso frio. Mañana comienza una nueva semana y aun queda mucho por hacer.